martes, junio 13, 2006

El problema de los apellidos


En este Mundial de Fútbol es un vacilón escuchar a los narradores lidiando con apellidos impronunciables. Por ejemplo, la gente de radio Monumental-Reloj nunca pudo con el número siete de Alemania, Bastian Schweinsteiger.

Pilo Obando fue más inteligente y se la jugó diciéndole, simplemente, "taiger".

Al Día
13 Junio, 2006